VOLVO 7150: El intento por conquistar las rutas económicas en México

Cuando VOLVO BUSES llegó a México (1998), se encontró con un mercado muy distinto al que conocía. El volumen de ventas, el número de empresas, rutas y servicios estaban muy por encima de lo que tenía en otros mercados.


Como era lógico, no solo quisieron comercializar autobuses de larga distancia como el venerable 9700, que tan buenos resultados les dio al consolidar su presencia en el mercado mexicano.

Fue así como decidieron lanzar un modelo para corta y mediana distancia, enfocado en líneas o empresas que prestaban servicios económicos o turísticos. Este nuevo autobús debía ser polivalente, pero a un precio accesible. El VOLVO 9700,aunque era un excelente vehículo, era costoso y ofrecía prestaciones que excedían las necesidades de este segmento.

VOLVO contaba con el chasis ideal para esta misión: el famoso B7R, que había obtenido buenos resultados en otros mercados y que se adaptaba perfectamente a las necesidades de los clientes objetivo de este nuevo autobús.

Sin embargo, debían encontrar un socio carrocero para dar forma al proyecto. Los candidatos ideales podrían haber sido Irizar con su modelo Intercentury o Busscar con su modelo 320, que en ese tiempo comenzaba a ganar impulso. Busscar ya era un socio conocido por VOLVO, no solo en el mercado sudamericano, sino también en México. Cuando tomó las riendas de Mexicana de Autobuses, Busscar carrozó algunos JUM BUSS 360 con el chasis B12, además de entregar un lote de B7R-Busscar 320 a Pullman de Morelos. Desconozco el número exacto de unidades entregadas.

Sin embargo, tanto Busscar como Irizar trabajaban muy cerca de SCANIA y Mercedes-Benz. Esto probablemente llevó a VOLVO a buscar una opción propia: un modelo que les permitiera distinguirse de la competencia. Para lograrlo, aplicaron una estrategia que más adelante seguirían en México: traer una carrocería "exclusiva" de un fabricante emergente.

Fue así como COMIL dio forma al nuevo modelo de VOLVO, basado en el diseño del Svelto pero con cambios estéticos que le imprimieron el sello distintivo de VOLVO.

Así nació el VOLVO 7150, equipado con el motor D7C, un 7 litros de 6 cilindros con 300 caballos de fuerza, que buscaba un equilibrio entre rendimiento y desempeño. Este modelo incorporaba la novedosa caja de cambios electroneumática G8 EGS de 8 velocidades, aunque también ofrecía la opción de transmisión manual ZF S6 85 de 6 velocidades.

El VOLVO 7150 contaba con suspensión neumática, dirección asistida, frenos ABS opcionales y un tanque de combustible de 500 litros. Todo esto en un autobús de 11.6 metros de largo, 3.1 de alto y 2.5 de ancho.

En primeras impresiones, parecía la combinación perfecta para acceder a la tecnología de VOLVO mediante un autobús de prestaciones más modestas, pero diseñado para las demandas de los servicios económicos de México. Sin embargo, el modelo tuvo pocas ventas. Las empresas que apostaron por él fueron contadas y el número de unidades no alcanzó las expectativas.

Recuerdo haberlo visto circular en Autobuses Baltazar, Transhidalguenses e incluso en el IPN. Aunque su potencial era enorme, el mercado no recibió el modelo como se esperaba.

¿Qué pasó? En esos años, VOLVO tuvo la fama de ser un producto caro de comprar, caro de mantener, difícil de encontrar refacciones y poco eficiente para rutas en sierra. No puedo asegurar ni desmentir estos comentarios, pero es lo que escuché en esos años. Tal vez no sea tan ilógico. Recordemos que la marca tenía relativamente poco tiempo en nuestro mercado, así que posiblemente el tema de refacciones sí era un desafío. Respecto al costo, es cierto que VOLVO no es barato. Quizás los clientes de este modelo preferían optar por autobuses más conocidos que ya estaban disponibles en esa época.

Otro factor pudo ser el cambio de hábitos que implicaba para los conductores. Este autobús, con tecnología avanzada, no podía manejarse como los vehículos a los que estaban acostumbrados. También pudo influir el desconocimiento del personal de mantenimiento, que no estaba familiarizado con el tren motriz de VOLVO. En cuanto al desempeño, dudo que el B7R no estuviera a la altura, pero es posible que no estuviera completamente adaptado a las demandantes rutas nacionales.

Sea cual sea la razón, el VOLVO 7150 quedó como testimonio del intento de la marca por ganar presencia notable en este segmento.

Cabe mencionar que esta no es una versión oficial, ya que incluso no recuerdo la fecha exacta en que se lanzó este modelo ni el año en que fue discontinuado. Escribo lo que guardo en mi memoria de aquellos años en los que empezaba a interesarme por este apasionante mundo del transporte. Aunque puedo calcular que el VOLVO 7150 se fabricó entre 2002 y 2004, podría estar equivocado. Si tienes el dato exacto, házmelo saber.

Finalmente, te dejo la ficha técnica del modelo y algunas fotografías de su paso por las marcas que mencioné. 



¿Tú viajaste en el VOLVO 7150? ¿En qué empresa recuerdas haberlo visto circular? 

Muchas gracias por leerme.

Comentarios

¡Sígueme!